miércoles, septiembre 26, 2007

Cicatriz



estaba tan furioso y ni siquiera recuerdo el motivo recuerdo en cambio el cristal rompiéndose alrededor de mi mano el ruido del cristal haciéndose pedazos y cayendo al suelo el dedo abierto las gotas de sangre espesa y roja sobre el parquet su cara de espanto corrí a la habitación sujetándome la mano dejando un reguero de sangre a mi paso el corte era profundo en el dedo meñique tanto que se me veía el hueso llamé a Marta nervioso le conté lo del cristal de la puerta le conté que me embargó la ira y solo pude golpear la puerta sin pensar le conté que me estaba viendo un hueso por primera vez una falange que era verdad que había huesos ahí dentro vertebrando los cuerpos mamá estaba fuera del cuarto me hablaba me ofrecía ayuda pero yo tenía mi orgullo atravesado en la garganta le decía que se fuese que no quería saber nada Marta me dijo desde el otro lado del teléfono que cediese que me dejase llevar al médico finalmente salí mamá se puso el abrigo me abrazó me miró el dedo mamá ya solo se preocupaba por mi corte había olvidado todo lo demás la discusión el motivo de la discusión había limpiado mi sangre del suelo con un paño de cocina me llevó al ambulatorio a dos calles de casa era de madrugada estaba vacío era un día laborable reinaba el silencio allí un médico calvo gordo simpático adormilado me cosió sabiamente la herida tras atender a un gitano borracho que tenía hepatitis o eso decía

aún se adivinan los puntos sobre mi dedo tres siglos después

aunque sane la herida queda siempre la cicatriz




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el montaje fotográfico con el autor perplejo por cuadruplicado es cortesía de la ínclita Esther a.k.a. La Nini.

sábado, septiembre 22, 2007

Me pones punk, punk, punk,
cuando te miro y tú miras al techo o al cielo,
me pones punk y me lo juego a suertes,
si sale cara tomo tu cara
y sello tus labios con mis labios,
si sale cruz hacemos un juego:
yo me tumbo en la cruz,
tú me clavas los clavos.

No hay nada que aprecie
más en ti que el desprecio,
ese muro aviva el deseo.


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Esta semana Txe Peligro en DULCE ARSÉNICO:
http://dulcearsenico.blogspot.com

Y además, Txe Peligro galardonado con el prestigioso tercer premio "María Giralt de Relato Corto"

Weah!

miércoles, septiembre 19, 2007

Y cuando duerme se oxida su cuerpo, pero no solo eso,
también la cama, la sábana, el suelo, las paredes, la ventana,
la luz, la esperanza, el espinazo de la noche, la mañana.
Y al fin despierta y su mirada neonata extrae de nuevo la belleza
de allí donde se posa, y va mirando el mundo somnolienta
y el mundo se descubre ante ella, paso a paso, parte a parte,
trozo a trozo deja el sueño, cobra entidad de nuevo todo,
el cielo se despliega, la tierra se hace sólida y caliente,
se disuelve la herrumbre allí donde ella mira.

Ya es de día,
todo suena y todo vibra.


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esta semana Txe Peligro en DULCE ARSÉNICO: http://www.dulcearsenico.blogspot.com

lunes, septiembre 17, 2007

Falta el aliento cuando se vive a la carrera,
entre el atentado y la fiesta, desde la guerra
a las páginas del libro donde algún día dormirán
estos poemas, falta el aliento y no basta el latido
de un pulmón para suplir de aire a esta hoguera.
Cre-pi-to, me consumo, y he aquí una brutal
metáfora de esta opresión: un yunque sobre el pecho,
y más abajo, las chispas que desprenden dos cuchillos
que se cruzan en mi vientre demandando ansiolíticos.
Lexatin, Orfidal, la paz química se impone suavemente
en el sistema nervioso desbocado, se doman los caballos
en la entraña de la mente que tantas veces
se convierte en ese cuerpo al que le falta el aliento,
que vive a la carrera, y se queda exhausto,
sin resuello.


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esta semana Txe Peligro en DULCE ARSÉNICO: http://www.dulcearsenico.blogspot.com

miércoles, septiembre 12, 2007

Ale ya no vive aquí


Ojalá nunca nos viéramos movidos a la poética de la pérdida, pero todo ojalá implica precisamente su opuesto, así es que Ale nos deja, se va. Ale, gran amiga desde hace cuatro años, compañera de piso desde hace dos, se muda a Sevilla en busca de una vida mejor. Los motivos: un sueldo mastodóntico, un trabajo mejor y, a qué negarlo, una triste situación en todos los ámbitos durante sus últimos meses en la capital. Quiero a Ale como a una hermana que nunca tuve, mi amor por ella es calmado y físico, visceral y telúrico, como el que uno siente por una parte de su propio cuerpo. Así que su marcha me hace sentir como si me arrancaran una pierna, un brazo o cualquier órgano vital, el hígado, por ejemplo, o un puñado de tierra del pecho. No quiero caer en el lirismo fácil de la nostalgia desbocada, pero su marcha me ha hecho recordar estos cuatro años de ese grupo explosivo y hedonista que se formó allá por el 2003 y que se ha ido disolviendo poco a poco. Fuimos gente anónima y perdida en la ciudad que se encontró en nocturnas casualidades cósmicas y formó un comando, unido por sus tendencias estéticas, sus adicciones y aficiones, una familia de descastados. Acabamos conviviendo en las mismas casas, en los mismos barrios. Pero somos ya muy pocos de aquellos, aunque hayan ido llegando más. Los que quedamos de aquella camada, de aquella generación ya casi extinta, albergamos el sentimiento de supervivientes o de náufragos. Un sabor de fin de fiesta al fondo de la boca.

Suerte.

viernes, septiembre 07, 2007

Algunas reflexiones sobre la sociedad de mercado o El capitalismo me robó la virginidad

1. Los creativos publicitarios de Burger King parecen tener en muy poca estima la capacidad intelectual de las clases trabajadoras; así, en las puertas de algunos establecimientos se puede ver un anuncio de reclutamiento donde se pretende enmascarar, bajo un simpático juego de palabras, una ironía lacerante. El cartel de marras muestra el logo de la empresa, una foto al más puro estilo United Colors of Benneton en la que posan alegres un grupo multirracial de trabajadores, cada uno con su gorrita, y debajo de esto el devastador lema: “Buscamos a gente que quiera comerse el mundo”.

2. Los Lazy Beggars son unos mendigos que ustedes conocerán si se mueven por Madrid en invierno, en Caños de Meca en verano, además de otra miríada de lugares del mundo. Son esa estrambótica pareja que inventaron eso de poner varios tupperwares en el suelo cada uno con una leyenda: “para comida”, “para birra”, “para cocaína”, “para resaca”. “Al menos somos sinceros”, es su leiv motiv. Los Lazy Beggars son el primer grupo de pedigüeños que han adoptado técnicas de publicidad y marketing, aunque algo toscas, y, de hecho, disponen de una página web donde explican sus motivos, sus biografías y sus movimientos por el ancho mundo, además de una extensa galería de fotos donde posan con alguno de sus benefactores anónimos. Según se puede leer en el sitio web la máxima de su precaria filosofía es “ofrecemos más que los otros, cambiamos limosna por provocar una sonrisa”. Juzguen ustedes.

3. De niño pasaba algunos sábados con mi tía, cuando mi madre salía. La ruta era la siguiente: misa, corteinglés, macdonalds. Después de soportar el tedio que le supone a un niño la eucaristía mi tía me daba un largo paseo por todas las secciones del centro comercial. Primero yo la acompañaba mientras ella veía todas las cosas que le interesaban y luego ella me recompensaba con un juguete de la última planta. Así me pagaba por el tedioso tiempo en la iglesia y en la sección de ropa de mujer madura y relojes lujosos. Por si no fuera suficiente, luego, para extasiarme, me convidaba a un Happy Meal en el fast food del payaso siniestro, con lo cual yo me sentía doblemente recompensado. Era feliz, créanme.

4 . Pero todavía queda la esperanza, puede haber aún un revulsivo que trastoque las cosas para siempre y las ponga del revés. No sé si ustedes se han fijado, pero antes, en los lugares donde se despacha en varios puntos, véase cines, restaurantes de comida rápida, oficinas de correo, los clientes solían formar una cola delante de cada uno se esos puntos, de modo que, en virtud de la Ley de Murphy, uno siempre se ponía en la cola que avanzaba más lento. Pero ahora, tras algunos años, la gente ha decidido espontáneamente formar una única cola que se distribuye entre todas las taquillas o cajas, avanzando más rápido e igual para todos. Es un proceso de autoorganización similar a los que ocurren en la base de la biología y que se ha llevado a cabo durante un tiempo propio de los procesos evolutivos o geológicos. Un detalle que le hace a uno creer de nuevo, al menos por un momento, en el ser humano y albergar una pizca de esperanza en una sociedad autogestionada e igualitaria. Que así sea. Salud.

miércoles, septiembre 05, 2007

Momentos de la vida del artista

Que ya es hora de hablar de uno mismo.

A veces ocurre: uno sale de unos líos para meterse en otros, ya ven, mi agosto en Oviedo fue caótico y bombástico, y durante las últimas jornadas casi desfallezco inmerso como estaba en una vorágine de nocturnidad, estudio y todo tipo de angustias y ansiedades. En mi primera jornada de vuelta Madrid tuve el examen de Atmósferas Estelares, la asignatura más pétrea de la especialidad de Astrofísica. Creo que nunca había sufrido tanto con la preparación de un examen pero finalmente me sorprendí a mí mismo haciendo la prueba mucho mejor de lo que esperaba; todavía está por ver si la profesora, una de las más duras corrigiendo y con la que ya tuve muchos tormentos en otras ocasiones, piensa la mismo. Después del examen, y por motivos personales de los que prefiero no hablar, volví a chapotear en viejos fangos que ya deberían estar resecos y olvidados pero que inopinadamente han vuelto a escena. Una de las cosas que más me desespera es la imposibilidad de la comunicación entre las personas y no tanto porque el lenguaje sea defectuoso, que lo es, sino por las pocas ganas que tenemos unos y otros de entender nada de lo que ocurre y por la forma en la que vivimos instalados en la subjetividad, que al final es la única realidad que existe últimamente. Al final tuvo solución, no teman.

Ahora lo que me queda este mes es acabar la carrera en cuatro incómodos pasos, los cuatro exámenes que trufan mi futuro hasta finales de septiembre, cuando llega el abismo. Vuelvo a sentarme en bibliotecas repletas de estudiantes y compruebo desesperado que ellos son cada vez más jóvenes y yo cada vez menos, y rezo secretamente para que ésta sea ya la última convocatoria de mi vida, que ya me vale. Cuando coges años compruebas, algo horrorizado, que los hechos más nimios son agudos cinceles que perfilan la estima hacia uno mismo; y se ve uno azorado y ansioso por los acontecimientos futuros, por las puertas que habrán de cerrarse para que la existencia transcurra por caminos unívocos y rectilíneos hasta configurarse esa rutina ignominiosa que debe de ser lo que llaman vida adulta. Propongo una vida múltiple y expansiva. Y que no llegue el otoño, que da miedo.

domingo, septiembre 02, 2007

Tres amigos

Yo penetraba su vagina y tú le introducías al mismo tiempo tu miembro erecto por el culo; allí, dentro de ella, y a través del trozo de carne que separa el coño del recto, sentía el roce de tu verga, como dos espadachines cruzando sus espadas. Ella gemía, gritaba, farfullaba obscenidades y parecía poseída por todos los demonios del vicio sodomita, hasta que llegaba Juan y la dejaba muda en un instante con lo suyo. Era hermoso aquel silencio y era hermoso aquel amor.