martes, septiembre 07, 2010

Mi amiga mutante

Tengo una amiga que es mutante: donde todos los demás tenemos los sobacos, ella tiene las axilas. Y eso no es todo, mi amiga vive en un mundo diferente y paralelo, en el que los ciegos no son ciegos, sino invidentes, y las cosas no decrecen, sino que crecen negativamente, y las parejas no rompen, sino que consideran que deben ver a otras personas durante algún tiempo.

En el sitio donde vive mi amiga –me lo ha contado en muchas cartas, que ella llama comunicaciones postales- no hay pobres ni hay ricos, sino que hay humildes y hay pudientes -qué maravilla- y no hay despidos masivos ni quiebras, sino expedientes de regulación de empleo y suspensiones de pagos. Últimamente ya ni siquiera hay suspensiones de pago, sino, abracadabra, concursos de acreedores. Mi amiga que vive al otro lado está muy guapa aunque tiene sus añitos porque en vez de arrugas tiene líneas de expresión facial (cuando sea vieja no será vieja, será uno de nuestros mayores). Tal cosa le permite, en vez de ser un buen zorrón, que es de lo que la tacharíamos aquí, ser solo un poco ligerita de cascos. En vez de follarse a cojos, mancos, tuertos y todo tipo de lisiados, mi amiga mantiene relaciones sexuales con discapacitados. Es su perversión, digo, su parafilia. Y en los lupanares, lo que hay son meretrices. ¿No es excelente?

Yo creo que me voy a ir a vivir a donde vive mi amiga, porque allí la gente no tiene resacas, sino migrañas, y nunca muere de cáncer o cosas chungas, postrada en una cama, enchufada a una máquina, atravesada de tubos; sino que fallece después de una dura batalla contra una grave enfermedad. Y si algo hay más auténtico allí, eso es la felicidad.

24 comentarios:

Meme dijo...

Y la felicidad allí no tiene otro nombre políticamente más correcto, por no decir demagogo?

Nicolás Fabelo dijo...

Diablos, tu post es una buena patada en los huevos a los eufemismos estúpidos... diantre, quería decir una impugnación de lo políticamente correcto

Caos dijo...

Demasiados mutantes sueltos por ahí...menos mal que siguen existiendo los auténticos, los de la lengua suelta y envenenada. Los incorrectos sin miedo.

saludos.

Reina del Mango dijo...

Ole.

Belén dijo...

¿Cómo se llama ahí la felicidad?

Besicos

pmantilla dijo...

Disfrut{e mucho de la lectura de tus post,...vivo en Ecuador y ac{a pasa nada,...y pasa todo a los ojos de los indolentes y de los victimados.

Pero vale, estoy ac{a,..tengo un grupo de funk y pop,...espero cuando tenga algo grabado hacertelo llegar,....ojalá puedas colaborar con una que otra letra para nuestras canciones

Un abrazo
Patricio Mantilla

pcbcarp dijo...

¿Tu amiga sale en la tele? Es que me suena muchísimo. Por cierto, observo que bordeas el abismo de lo incorrecto: "discapacitado" ya es incorrecto también. Según mis últimas noticias, si te falta una pierna eres P.M.R. (Persona de Movilidad Reducida)

Anónimo dijo...

Según el diccionario, eufemismo es el "modo de decir o sugerir con disimulo o decoro ideas cuya recta y franca expresión sería dura o malsonante". ¡Maravillas de la lengua y del inconsciente! Una somera relación de la Prensa, en pocos días, me ha hecho descubrir (por un estremecimiento de incomodidad al leerlos) los siguientes eufemismos: no vidente, por ciego (¿ofende nuestra buena conciencia de videntes algo distraídos hacia el destino ajeno?); clases económicamente débiles, por pobres: apreciación del dólar, por subida (¿subirá menos, si está apreciado?); afección, por enfermedad (debe ser más difícil morirse de una afección que de una maldita enfermedad) y una joya de nuestro lenguaje... (o de nuestro inconsciente):intervención militar, por invasión. Seguramente el país que interviene militarmente atente menos contra los derechos de los nativos que un brutal que invade.

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Sin embargo, no hay eufemismo inocente... El lenguaje, creado, en principio, para expresar la realidad, ha inventado su propia máscara: es utilizado muchas veces, para ocultarla, respondiendo a determinados intereses. Así, los interrogatorios de rigor a los que son sometidos los prisioneros o detenidos en muchos países disimulan la tortura en su acepción más brutal, y los reajustes de plantilla los despidos lisos y llanos.

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La pregunta ronda los ejemplos: ¿Cuándo y por qué una sociedad o algunos de sus individuos apelan al eufemismo? ¿Es posible que el lenguaje consiga, verdaderamente, ocultar la realidad? Entonces recuerdo un decreto inefable de la Junta Militar uruguaya en los años 60:(...) por decreto se prohibían ocho palabras. No era posible pronunciar ni escribir las palabras tupamaro, revolucionario, célula, marxista, etcétera. De modo que cuando un tupamaro asaltaba un banco (porque la desaparición en el lenguaje no consiguió eliminarlos de la realidad), los ciudadanos probos y bien nacidos, respetuosos de las leyes y decretos, debían decir los sediciosos, única palabra aceptada, que de pronto gracias al ingenio popular, se transformó en los deliciosos. Eliminar una palabra (o sustituirla por un eufemismo) es una de las peores confesiones de impotencia o debilidad: en lugar de transformar los hechos, que son los que nos disgustan, operamos sobre el lenguaje, que no es más que la representación simbólica. Como si secretamente creyéramos en la identidad de la cosa y los sonidos destinados a expresarla. Pero un país que eliminara de su vocabulario la palabra frío, seguiría sintiéndolo.




Quizá te interese este articulo de Peri Rossi, me ha recordado... Un beso!

Anónimo dijo...

Pues yo estoy hasta el moño de los defensores de la incorrección política. Muchísimas veces, me parece que lo que defienden es la grosería, bajo ese barniz de guays contracorriente.

Besinos,

I.T.

Txe Peligro dijo...

no es defender la incorreción, es defender la lenguaaaarl

Txe Peligro dijo...

no es defender la incorreción, es defender la lenguaaaarl

la cónica dijo...

al pan, pan

manipular el lenguaje es una forma de manipular las ideas, y eso no es lo peor, lo peor es que es eficaz.

Txe Peligro dijo...

si, como en 1984. la paz es la guarra.

nancicomansi dijo...

Bueno...una cosa son los sinónimos (que bonita la variedad para escoger) y otra muy distinta eso tan gracisoso del P.M.R y similares...
Tampoco, y sobretod, puedo con los eufemismos a nivel político y/o económico...eso si es "rabioso"!!!

34645645y dijo...

Pero alli donde vive tu amiga todo es mas artificial y deformado,como visto a traves de un trozo de plastico.
Muy buen post
Queria invitarte a que le echaras un ojo a mi blog de literatura (http://legrimoiredenyneve.blogspot.com/)y si te parece bien,afiliarnos.
Espero tu respuesta.
Te sigo!

Anónimo dijo...

Bueno, siendo así, me quedo más tranquilaarrl. (Esto de que me mole tanto la corrección política es lo que tiene, que estoy tan acostumbrada a eufemismos que me cuesta enterarme de la verdadera almedrita).

No me gusta quienes deforman el lenguaje, aún menos si lo hacen con propósitos demagógicos. Pero, qué le voy a hacer, prefiero que a un homosexual se le llame "homosexual" antes que "comepollas" y que de una mujer se diga que va "provocativa" y no "con una pinta de guarra que te cagas".

Será porque veo que muchos "políticamente incorrectos" se creen con una superioridad moral que me hace hasta gracia... perdón, que es descojonante.

Si sueno un poco avinagrada, es que me he pasado una noche en blanco. Ay... Saludinos,

I.T.

Imposivle dijo...

eufemismo es una palabra ya tan cargada de connotaciones negativas que debería haber otra expresión más suave para referirnos a esta sin tener que nombrarla.

Txe Peligro dijo...

ahí le has dao

Txe Peligro dijo...

Inés Toledo: ¿crees que es lo mismo un homosexual que un comepollas? ¿Una mujer provocariva lleva una pinta de guarra que te cagas?

jajaj, anda que... tus pensamientos si que son incorrectos, no me extraña que necesites eufemismos!

Anónimo dijo...

Sí, me temo que debe de ser un problema mío, tienes razón.

Besinos,

I.T.

Anónimo dijo...

(¡Cómo me has calado!, más listo, más guapo y más barato que la mayoría de los psicólogos, qué gusto, oye).

Más besinos,

Inés Toledo

Anónimo dijo...

La verdad, la verdad... me has hecho pensar.

I.T.

Anónimo dijo...

Oye, lo último, que esta noche estoy muy pesadina, lo sé y lo siento. Si firmo I.T. es para que sepas quien soy, no por pretensiones de ningún tipo, sino por una pequeña manía que tengo yo a los anónimos, me parece de mala educación no firmar, incluso aunque una entre a un blog a decir una chorrada.

No sé por qué no puse Inés Toledo, supongo que supe que con I.T. me conocerías de sobra, y abrevié, lo hago a veces... Lo hacía, ahora escribo mucho menos en todas partes. Aunque si me franquea el acceso a canapés, igual me lo replanteo (lo de escribir aquí y allá), pero no sé si como I.T.

Buenas noches, a ver si por fin me duermo.

Inés

Txe Peligro dijo...

no te rayes, I.T.