sábado, marzo 05, 2011



Tiene que haber una vida mejor,
pero no está aquí.

Destartalados parques de extrarradio
donde el metal muerde la grava,
y los niños buenos muerden polvo.

Medio día gris y se abren los barrotes del colegio:
salen los anoraks chillones de las chicas malas
bajo una lluvia muy fina que no es del todo lluvia.

Una vez hicisteis ruido
ahora seguís la vida a la mitad de vuestros padres,
ya no hay cielo que romper con vuestros pueriles
puños blancos.

Otra vez tuvisteis miedo,
pero ya ni siquiera eso,
ahora tenéis ladrillo visto
y toldos verdes de botella.

Nada es del todo lo que es en esta periferia,
todo está sin acabar, mal dibujado,
todo está a medio hacer o duerme en ruinas.

Esclerosis en las venas de la vida,
mientras las bolsas de plástico juegan con viento
al ralentí, baila el silencio.

El extrarradio no es un lugar físico
sino un estado del alma
cuando el alma ya no existe
como todo el mundo sabe
entre la grava.



(Sara Herranz lo ha dicho mucho mejor con su dibujin de arriba. Gracias)

4 comentarios:

tormenta dijo...

te iba a comentar para decirte que te he mandado un email desde la organización de versátil.es... todavía no he recibido respuesta.
digo, iba a comentarte eso, pero me ha encantado el poema. me ha encantado mucho. un saludo. esperamos respuesta.

Txe Peligro dijo...

gracias! ya te contesté

Santiago Bertault dijo...

Un final demoledor. De nuevo si señor si señor.
Y eso que siempre me acuerdo de Séneca con eso de los parabienes.

"Los necios alaban, los sabios aprueban"

¿Y que coño hacen las remoras?

Saludos bicho.

Sergio C. Fanjul (a.k.a. Txe Peligro) dijo...

remorin! gracies! a ver si te veo pronto con un yaguer!