martes, mayo 24, 2011

Crecimiento exponencial y pollas duras



- Un Emperador en la Antigua China quería ganar una importante batalla – le dije el otro día a mi alumno Miguel.- Para ello necesitaba consejo, así que viajó durante tres largos días para visitar al Sabio de la Montaña. Entre niebla y cañas de bambú, el Anciano le dijo al Emperador que, si su consejo servía para ganar la batalla, debería pagarle un grano de arroz en el primer escaque de un tablero de ajedrez…
- ¡Prof. Peligro! ¿Qué es un escaque?
- Un escaque es cada uno de los cuadrados del tablero de ajedrez, hay 64. Sobre ellos se ponen los trebejos, que son las figuras.
- ¡Ah! Bueno, ¿hacemos un descanso y jugamos una al Final Fantasy?
- No, escucha esto.
- ¿Y si te leo mi nuevo relato? ¡Va de elfos!
- Me cago en todo, joder, escucha.
- …
- Total: que el Venerable Anciano le dijo al Emperador: “Me pagarás poniendo un grano de arroz en el primer escaque, dos en el segundo, cuatro en el tercero, ocho en el cuarto, doblando la cantidad hasta llenar el tablero. Si no me puedes pagar, heredaré el Imperio”. El Emperador pensó: “pobre iluso, solo quiere que le pague con arroz, y a Mí me sobra”. Así que recibió el consejo, lo puso en práctica y ganó, no solo la batalla, sino la guerra. Cuando fue a pagar su deuda se dio cuenta de que en su Imperio no había suficiente arroz para pagarle tal y como habían acordado. Si hay 64 escaques en el tablero, tendría que pagarle dos elevado a 64: es decir un 2 seguido de 19 ceros, más granos de arroz que estrellas hay en la galaxia, tal vez más de los que existan en el Cosmos conocido. Así el Viejo heredó el Imperio.
- Hostia –dijo Miguel-, no parecía tanto.
- El problema del Emperador es que no conocía el crecimiento exponencial, que es lo que aquí ocurre. Nuestro cerebro está acostumbrado a pensar en crecimiento lineal, de tal forma que una cosa crece proporcionalmente a otra. Pero hay muchas cosas en el mundo que crecen de forma exponencial, por ejemplo, los idiotas, como se puede comprobar en unas las elecciones. - Entonces dibujé en un papel una exponencial y una lineal para ilustrarlo.
- Ya –dijo Miguel al verlo-, es como los actores porno: a algunos se les pone recta y a otros se le empina con esa curva exponencial, hacia el infinito, como a Nacho Vidal. Heredará un Imperio.

4 comentarios:

Javier Divisa dijo...

Muy buena esta tesis exponencial. Somos tan lineales. Sí, a Nacho Vidal, le ha dado dinero al estilo exponencial, su curva.

Mercedes dijo...

Qué barbaridad!!es cierto que en época de elecciones el crecimiento exponencial de los idiotas se nota más. También pasa en mi país (Argentina)

The Doll dijo...

Interesante teoría, la jugada es manternerla, no la teoria, si no la exponeciacion.
saludos

Liber dijo...

Joder! Ojalá me hubieran explicado a mí así conceptos matemáticos...Los únicos senos que he llegado a comprender en mi vida son los que tengo encima del ombligo; los desgraciados cosenos realizaron un viaje a ninguna parte de mi universo cerebral y nunca regresaron al rinconcito del entendimiento.
Me pregunto, si leo este blog habitualemnte ¿lograría superar mi complejo de analfabeta de las ciencias exactas, o tendría que asistir a tus clases para ello?