Estrené mi sexo
con mi almohada.
La abrazaba con mis piernas
y su cuerpo se amoldaba a mis deseos.
Era blanda, menuda y amable,
olía a suavizante.
Nunca la valoré lo suficiente
mientras estuvimos juntos,
imaginaba que ella era otras mujeres
-compañeras del colegio,
modelos de revista,
la que fuera-,
le era infiel de esta manera.
Comprendí mucho después
que ella era mejor que muchas otras,
aun careciendo de la piel y del aliento,
aun estando rellena de plumas.
Ella fue mi maestra.
Después de hacerlo
apoyaba en ella la cabeza.
miércoles, diciembre 19, 2007
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32 comentarios:
A mi se me cae la baba en la almohada, la tengo amarillenta debajo de la funda, y eso que la cambio cada poco... eso cuenta como experiencia con la almohada?
Por cierto también aparece siempre llena de pelos, pero nunca duermo sin ella
Saludos Txe
Sin palabras... tu relato me ha hecho pensar en mis vivencias con la almohada...jamás hubiera pensado en ello antes!
Todos la utilizamos y la despreciamos en algún momento de nuestra vida... y dicho así, lo mal que suena...
Llenas de vísceras y huesos,
concavidades y convexidades,
una mujer y otra y muchas otras
se estremecen entre los versos
catorce y quince.
Tela. Tela.
Besos
Todas las almohadas tienen secretos que contar, seguro.
Besos
JA, JA...COMPAÑERA D BATALLITAS
JA, JA...COMPAÑERA D BATALLITAS
Le veo muy nostálgico!
¡El onanismo es pecado!
Ya veo por lo que dices de las compañeras que fuiste a un colegio mixto con chicas. Está demostrado que eso no es bueno por que despierta prematuramente la concupiscencia.
¿Y le consultabas algo? ;)
Desnudar su ajustado traje...
iba a decir una barbaridad pero mejor me callo..
sí, tus palabras rezuman nostalgía ¿no? vamos sintiéndonos viejos?
oye, no me contestaste al mail!!
Hola de nuevo.
Me permites una sugerencia a la poesia. Sugerencia desde una 'petardilla' de Ciencias...
Sustituye la palabra 'almohada' en la primera estrofa...
Solo una idea cuando he releido.
;-)
Besos.
Su primera vez... Era torpe, muy torpe. Me agarró a toda prisa para marcharnos de aquella habitación que no era nuestra. Claro que no apoyó su cabeza en mi pecho. Yo tenía un extraño interior sintético.
(de Usted - Almudena Guzmán, Hiperión)
Usted se me escapa en los pasillos como
un discóbolo impregnado de aceite.
Pero todo lo que habla es una mano enguantada
por mis medias.
(Desnuda, froto su voz contra las caderas de la sábana
para no dormirme tan triste.)
La almohada ¿ehh? seguro que tiene nombre de estrella. Ella está segura siempre que la necesitas y además jamás hará reproches si de vez en cuando la relegas. Alguien debió de arañarte el corazón y te mandó a la almohada. También hay una primera vez para ellas, las almohadas, y siempre, siempre regresas a quien te acoge entre plumas.
Besos.
Tan joven y ya tan nostálgico... ¡Vamos hombre! ¿Dirás que ya no la abrazas?
Besos,
Vaya! Para lo que da una almohada...
Aix,las almohadas, esas dulces compañeras... Gracias por la bienvenida. Un beso!
Jajaja!!! Pues a mi me ha hecho reír la poesía a la almohada...
No lo había visto nunca de esa manera...
Ains...
Mil besos!!!
Y luego te quedaba el hueco para meter la oreja, no me digas!
Genial! ;)
Si, y algunas tiene nombres tan raros como viscolástica, pero que adaptables son.
Saludos y felices fiestas
Buenas, sin animo de ser maleducaco
Escribes mucho mejor que eso ultimo
Con afecto sin conocimiento.
Un saludo desde Oviedo
Me has dado una idea. Tengo que probarlo ahora que mi almohada es de látex.
Saludos de Mos.
Sólo valoramos en su justa medida lo que perdemos.
besos
Ella siempre tan cálida... Jamás protesta.
Si las almohadas, hablaran, qué dirían, Txe, todo un Expediente X.
Felices fiestas y si puedes pásate por ese tal vez un blog más en el que he hecho un resumen del año.
Cómo habrá quedado la pobre! Kamasutra completo y sin chistar no?
Felicidades!
muy erótico
La historia de tantas otras almohadas, que además nunca se quejan. Pero la duda siempre era... ¿habrá gozado también ella?
At night, alone, I marry the bed.
Dios como me gusta este poema!
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