lunes, mayo 05, 2008

De viaje

No me sirven los viajes rápidos y cómodos, con reparto de caramelos y regalo a fin de trayecto: el viaje ha de ser duro, largo, doloroso, por eso es preciso viajar en autobús de línea y no en tren de alta velocidad o avión, hay que sufrir las estrecheces, el dolor de espalda, el tedioso paso del paisaje más allá de la ventana, las horribles películas que proyectan. De nada sirve tomar el AVE y llegar a Sevilla en dos horas, o en tres a Barcelona, eso es como no haber salido de casa, no significan nada los viajes rápidos, las tardes de museos, las visitas a los rincones más típicos de la ciudad visitada. Todo viaje exterior es también un viaje interior, una catarsis, un nuevo nacimiento, por eso hay que viajar como quien es alumbrado en el parto, como quien es arrancado dolorosamente de un lugar y es arrojado a otro. Para que sirva, para que el viaje sea viaje, tiene que ser un trauma que se sublima, una heroica hazaña, una Odisea con parada en cada estación de servicio, en cada bar de carretera, comiendo bocadillos de tortilla, oyendo los cantos de sirena ardiendo bajo el sol vertical del verano, muy poco a poco, a bordo de un coche viejo y caliente. Para lo demás es preferible viajar sin salir de la cama, oculto bajo la sábana, en la penumbra amarilla, o hacer viajes astrales en los baños de los bares.

27 comentarios:

la cónica dijo...

Sí, señor. Cruzando el puente de mayo contracorriente.

P.S. Salieron los relatos de renfe en un cuadernillo. Circulan por el instituto. Cuando pueda, me hago con uno y te lo mando, si no lo tienes.

Ale dijo...

trainspotin

yo, la reina roja dijo...

Txe, peregrino.

Saludos.

isabel dijo...

sin salir de la cama, claro

elpalabarista dijo...

Yo últimamente viajo en los baños de los bares... Y no duele.

Trapi dijo...

Podemos irnos juntos lejos de este mundo tú y yo
en un viaje por galaxias infinitas hacia el sol...

Alnitak dijo...

Durante la mayor parte de mi vida los viajes míos fueron largos pero con caramelos al final, porque no había más opciones. Ahora comienzo a acostumbrarme al parto con dolor, porque no hay más opciones.

Batiscafo dijo...

llevo tantos viajes de seis horas en mis piernas que puedo decir que...ya no los quiero más, que son un horror, que no digas patrañas y blablabla yo quiero el teletransporte, aviones supersónicos, o alitas para volar...me puedes tachar de cómoda, pero también de inteligente

por cierto, tú siempre con la relación viaje exterior/interior...yo últimamente viajo mucho interiormente preparandome para el viaje exterior.
bs

Camille Stein dijo...

muchas veces viajo sin salir de casa, incluso sin moverme de la silla o el sofá... poder de ensoñación

nada como un viaje interior...

geometría, sí... de la imperfecta :)

saludos

Nodicho dijo...

meca, yes de felechosa?

Anónimo dijo...

sí, lo mejor quedar atrapado en una caravana de viajantes sin prisas.
en invierno en un coche que se queda sin gasolina entre la nieve.
en verano con un coche viejo sin aire acondicionado, ya no digo climatizador. por cierto, para no aburrirnos 5 en el coche.
pues acabas hasta los güevos, se te quitan las ganas de volver pero cuando lo recuerdas sentadito en una terraza... qué bien sienta la cerveza!
para volver mejor con un viaje interior.
salud-saludos

kay dijo...

Realmente eres un maldito genio. Como Baudelaire. Y me alegro de poder ponerte cara y tocarte de vez en cuando... porque eres tan bueno, tio
Un besazo

Luna Carmesi dijo...

Viajar es bueno.
La perspectiva cambia.
Incluso puede curar nauseas.

Muy bueno. Como siempre.
;-)

Miriam G. dijo...

Es verdad, para viajar, mejor un bar.

Un beso, Miriam G.

sb dijo...

apoyo con entusiasmo el coche viejo rodeados de amigos y la incertidumbre de verlo morir a cada subida.. ahora, con lo de autobús no paso, no puedo con ellos ;)

Achiperre dijo...

escrito así... atrae... pero joder...que es lo peor eh!...madre mía...qué deviajes en autobús como bien dices.... cuantas horas en esos sillones tannnn duross!!

Gracias por pasar por mi sitio!

Ro dijo...

Eso es un indicio de masoquismo, mireselo sr. Txe.

Absurdo Rutinario dijo...

Madrid-Cadiz (1h 10 min): 40 min avion, 30 coche. 6 días aprendiendo a olvidar el pasado. Ya he dejado atras los baches de los autobuses y los golpes de la memoria.

Ya vi el texto de cercanias. ¿Te presentaras a la segunda parte o nos darás alguna oportunidad?.
Un abrazo.

Naked dijo...

Sin salir de la cama seguro que se llega muy lejos... vamos... el mejor camino, seguro!! y donde más se sufre!!!

kuss

Anónimo dijo...

Pues lo siento Txe, pero acabo de cambiar de coche. He cambiado la horchada congelada por el aire acondicionado! jeje
un beso
Paco

Anónimo dijo...

Si señor, que duela y se sienta.

vaderetrocordero dijo...

A Nepal en mula!

E dijo...

como se nota que no viajamos casi todos los findes de allá para acá, mochila en ristre porque no tengo coche ni carné...

yo vendía mi alma por el teletransporte.

que no todo es On the Road, mister danger ;)

missangria dijo...

Estoy de acuerdo en que un viaje es más "profundo" si el traslado es tedioso, largo, a merced de las inclemencias del tiempo, etc. etc. qué tal saría viajar andando?? ¿me podrías aclarar el último punto del post??

Saludos!!!

T. dijo...

Esos viajes los echamos de menos, nosotros, los que dependemos del Estado para sobrevivir.

También poder comer uno de esos caramelos tan ricos que reparten envueltos en papel transparente que ya desde lejos huele a azúcar.

Inés Toledo dijo...

Viaje en Alsa, Oviedo-París,señora que me ofrecía tarros de infusiones con aspecto de meaos...

Viaje en Alsa, Oviedo-Bruselas, con un vestido de folclórica en la maleta y ensayos de sevillanas en las paradas.

Viaje en Alsa, Londres-Oviedo, conductores prefernandoalonsinos y autobús reventado, tras 18 horas de rallie, en Unquera, donde las corbatas. ("Con lo bien que íbamos", decían, "nunca habíamos ido tan rápido", los muy centollos).

Más romántico: viaje por Francia en tren con un saxofonista y unos chicos que volvían de África con serpientes en frascos...

Viajes de 12, 20, 30 horas.

Era otro tiempo y otra espalda.

De momento, para llegar a Madrid no necesito galletitas.

Anónimo dijo...

Me encanta tu visión de un viaje interior y un cambio correspondiente, ... incluso priorizándolo al viaje exterior... a lo que está por venir.

Un besote
Tharsis
http://mientrasvivimos.blogomundo.com